sábado, 18 de enero de 2014

CAPITÁN PHILLIPS (Captain Phillips)


Director: Paul Greengrass
Guión: Billy Ray (Libro: Richard Phillips, Stephan Talty)
Música:  Henry Jackman

Duración: 135 min
País: EE.UU.
Fotografía: Barry Ackroyd

Reparto: Tom Hanks, Barkhad Abdi, Mahat M. Ali, Barkhad Abdirahman, Faysal Ahmed, Michael Chernus, Catherine Keener, David Washorfsky


     Basada en hechos reales, cuenta la historia de como el Capitán Phillips, al mando de un gran barco de mercancías, y su tripulación son atacados en las aguas próximas a Somalia por piratas.




      Hasta hace poco tiempo, las aguas circundantes al cuerno de África hasta la península Arábiga suponían un peligro constante para todos aquellos barcos que pretendían cruzarla llevando mercancías desde un punto del globo al otro. El cabecilla, el hombre que se llevaba todas la riquezas y sometía al terror a los propios pescadores de la costa de Somalia para que secuestraran esos barcos, fue engañado y arrestado en Europa hace no mucho. Pero hasta entonces, muchos fueron los barcos afectados, entre ellos aquel en el que se encontraba Richard Phillips, persona cuya experiencia se basa esta película.

      El director responsable de las tres primeras entregas de la saga "Bourne" es el encargado de llevar a la pantalla la tensa experiencia del antiguo capitán de barco. Como en las películas de su saga más famosa, Greengrass pasa rápido por las formalidades iniciales y se dedica con todo oficio a la parte interesante de la historia, en donde el director libera todas sus habilidades. Desde el comienzo de las hostilidades por parte de los piratas, cuya desesperación les hace alcanzar esos enormes barcos a bordo de poco menos que balsas con motor, el inglés maneja un guión tenso y bien compensado, que escala el dramatismo poco a poco hasta el desenlace, dejando al espectador agarrado a la silla.

     Para asegurar la credibilidad de la película, incluye en su reparto un punto de referencia firme, Tom Hanks, que lleva el timón de la película todo el metraje, interpretando de forma creíble los dramáticos momentos que un hombre normal pasa en esa situación límite. Hanks destila sencillez, da igual que sea en la piel de un hombre con problemas mentales, un naufrago perdido en una isla desierta o un europeo del Este atrapado en un aeropuerto, sus personajes transmiten normalidad, dan la sensación de que lo que les pasa podría ocurrirle a cualquiera.
   
  Lo inmediatamente fácil seria poner a un personaje tan entrañable y cercano como Hanks enfrentado a unos descorazonados piratas a los que no les importa nada ni nadie. Sin embargo, los inquietantes visitantes del barco expresan desesperación, necesidad de supervivencia, los sentimientos extremos que alguien muestra cuando no le queda más posibilidad que hacer lo que hace para satisfacer al tirano de turno. La interacción entre protagonista y villanos es tensa y emocional, envolviendo al espectador en un torrente de sensaciones que no dejan preveer el desenlace final. El drama no se deja llevar por la maldad que respira el secuestro de un barco, sino que también deja entrever las razones a las que un grupo de Somalíes deciden tomar por la fuerza un carguero con todo lo que halla en él. 

La excelente ambientación, escenificada perfectamente durante toda la primera parte de la película en un enorme barco de carga transoceánico, se vuelve irrespirable en la parte final, donde uno se pierde a la deriva de lo que pueda pasar, a merced de lo que le pueda ocurrir a ese pobre hombre a manos de personas tan inestables. Los 10 minutos finales son de una habilidad extraordinaria, el director consigue hacer de 3 metros cuadrados el espacio suficiente para meter no sólo a los personajes sino a todos los espectadores de la sala, haciéndoles sentir parte participante de tan agobiante espectáculo.

Hoy por hoy hay pocas películas de accion que alcancen el nivel de tensión y realismo que despliega "capitán Phillips". Siguiendo la estela de supervivencia vista por ejemplo en "Deliverance", mantiene la maestría de sus obras anteriores, por lo que Greengrass se mantiene como uno e los maestros actuales de la acción, al menos hasta el estreno de su documental sobre el FC Barcelona.