LA VIDA DE PI ("Life of Pi")

 

Director: Ang Lee

Reparto: Surah Sharma, Irrfan Khan, Rafe Spall, Tabu, Adril Hussain, Gérard Depardieu

Año:2012

Guión: David Magee (Novela: Yann Martel)

Producción: Fox 2000 Pictures / Haishang Films

Música: Mychael Danna

Nacionalidad: EE.UU.

    Pi es un indio residente en EE.UU que es preguntado por un amigo escritor sobre su historia acerca de como emigró de su país, en cuya travesía sufrió un catastrófico naufragio que dio fruto a una increíble historia.

   Ang Lee ha sido el nombre de entre todos los directores orientales (chino taiwanés, para ser más exactos) que más lejos ha llegado en la historia del colosal país. Otros nombres como Zhang Yimou o Wong kar-wai también han logrado mucho renombre, y con razón, sobre su obra. Sin embargo, Lee es el absoluto pionero en esto, poseyendo la capacidad además de realizar un cine tan bueno como camaleónico, sobresaliendo en el cine oriental ("Comer, beber, amar") como en el occidental ("Sentido y sensibilidad", "La tormenta de hielo"), incluso atreviéndose con el cine comercial ("Hulk", 2003). Como la tendencia parece ahora costumbre, también hizo su pequeño homenaje a su país en el cine de artes marciales en la laureada "Tigre y dragón", y repitió éxito con el drama de nuevo en "Brokeback mountain". No es de extrañar por ello ver una película de este director nominada de nuevo a los Oscar, incluso sin haber hecho mucho ruido, compitiendo con un relato americano sin contenido americano. No obstante, las interesantes apuestas de este director siempre merecen un respeto, y en este caso presentó una candidata con hermosas sorpresas visuales.

     Siendo sincero, las ganas que tenía de ver esta película eran comparables a las que tenía de ir a trabajar un lunes. Sin embargo, al igual que el trabajo, me sentía en obligación de verla, dada su trascendencia y su participación en los Oscar. Sin embargo, puedo decir con agrado y satisfacción que el esfuerzo mereció la pena, ya que fuera del aburrimiento o el bochorno, me resultó un agradable entretenimiento, muy efectista visualmente y notable trabajo de dirección. El comienzo de la historia pasa por la presentación de dos amigos en casa de uno de los cuales se reúnen para que éste relate la historia de como llegó a América. Tras narrar la historia de su infancia y de como sus padres se hacen con el control de un zoológico en la India se nos van presentando los antecedentes lo que será el grueso de la historia principal, lo tan explotado en los avances y carteles, y que supuestamente conforma la parte más jugosa de la historia. Sin embargo, he de decir que la primera media hora de la película me sabe fresca, disfruto con la historia de ese niño que se hace grande, del adolescente despidiéndose para siempre de su novia, de la resignación de unos padres a los que no les queda más remedio que emigrar para seguir adelante dejando atrás la rocambolesca vida que semejante trabajo acarrea para buscar un futuro incierto en esa tierra tan prometida como es siempre EE.UU.

   El 3D es un fenómeno que me produce cierta grima. Esa pretensión de pensar que el cine es mejor porque simplemente se ve más nítido, como si las películas fueran sólo fotografías coloristas, simples vídeos nacidos para el espectáculo de luces, como si necesitáramos ver al personaje justo delante nuestra para poder sentir las emociones de la historia. No hablemos ya de lo que se ha encarecido el cine por querer disfrutar de estos novedosos efectos. Muchos han sido los fracasos además dentro de este área, y muy poco comentados, dado el espanto que les produce a las multinacionales las pérdidas de la inversión. "Alicia en el país de las maravillas" o la reciente "El hobbit" son buenos ejemplos. Sin embargo, y con el permiso "Avatar", "La vida de Pi" puede ser una de las pocas películas rodadas con esta tecnología que puede que produzcan un mayor placer en la experiencia del espectador (siendo además mucho mejor película que la de los seres azules). Las tensas escenas entre el protagonista o el felino que le acompaña, así como las escenas nocturnas, donde los luminosos peces acompañan a la extraña pareja, pueden ser realmente espectaculares con estos efectos, sin estar la película centrada en la explotación de estos recursos.

     La predecible relación entre los dos inusuales protagonistas se antoja más difícil de lo que cabría esperar. Ante la posibilidad de caer bajo un pastel de proporciones épicas, el director procura aguantar la fiereza de la bestia y consigue que la película sea "La vida de Pi", y no un nuevo "Libro de la selva". Ya se lo advierte su padre en los trazos iniciales, por mucho que mire a los ojos de la bestia, al final, el felino no mirará atrás por tí. Si es que uno, ya se sabe, no se puede fiar de los gatos. Con ello presente, Lee no renuncia del todo a la lógica, trazando un creíble (dentro de esta fantasía) desenlace.

    Por ello, y yo creo que contra todo pronóstico, el director taiwanés ha sido galardonado este año como mejor director, dejando en pañales al hijo pródigo Steven Spielberg, al violento Tarantino o a la rebelde Bigelow, en la edición de los Oscar de este año. No se si justo la mejor dirección en "La vida de Pi", película con muchos puntos destacables pero también de fácil construcción, en la que una vez que se tienen los ladrillos da la impresión de que la historia se monta sola. Sin embargo, puede que atreverse a contar la trama que esconde la captura y ejecución de Bin Laden, o llevar a la pantalla la abolición de la esclavitud (de hecho Spielberg se hace un nudo en algunas partes) no debe ser tarea nada sencilla al presentar ambas semejante cantidad de personajes. Sí parece difícil hacer que el espectador no se aburra viendo una película en la que la mayoría de los planos los protagoniza el inmenso océano, donde uno de sus personajes principales está hecho por ordenador, y donde el cambio de planos y el corte de las escenas resulta esencial para marcar el tempo en una película que va algo más allá de las dos horas. Su premio, no me parece injusto, dado que además la academia no iba a premiar a Affleck por su correcta "Argo" en la dirección, un caramelo demasiado dulce para un demasiado joven y todavía algo verde director. Affleck dirige con esmero, pero le queda mucho potencial por explotar antes de poder pasar por encima de un todoterreno como Lee. "La vida de Pi" es sin duda la película, de todas las nominadas, la más familiar, amigable y popular de todas.