Guión: Vaughan Sivell
Música: Stephen Hilton
Duración: 92 min
País: Reino Unido
Fotografía: Carlos Catalán
Reparto: Benedict Cumberbatch, JJ Field, Tom Burke, Adam Robertson, Rupert Frazer, Nia Roberts
Puntuación: 5,5/10
Un grupo de amigos encabezados por el gran Benedict Cumberbatch (en esta película llamado James), es un enfermo terminal de cáncer que decide volver a un lugar idílico junto a sus tres mejores amigos para poder verlo con sus propios ojos por última vez.
El tema de la amistad y de los viajes con amigos ha sido tratado mil y una veces en el cine a lo largo del tiempo, desde las ochenteras "Los Goonies", o "Cuenta conmigo" hasta la delirante epopeya de "Miedo y asco en Las Vegas", por poner un ejemplo más cercano a nuestro tiempo.
Los temas a tratar son casi siempre los mismos. La verdadera amistad, el futuro, las complicadas relaciones entre los protagonistas.., son tres de las más recurrentes, y en esta película aparecen las tres. El grado de amistad que se nos presenta en esta historia entres estos cuatro jóvenes británicos es bastante fuerte y tiene pinta de duradera, pero claro, a medida que pasa la película se tensa bastante, llegando casi al punto crítico: la ruptura. Pero esto no se desvelará en esta crítica si ocurre o no, hay que mirar la película para encontrar la solución.
El futuro es dónde más hincapié pone el director, por dos poderosos motivos; el primero es la muerte de nuestro protagonista a la vuelta de la esquina, y la segunda y también importante aunque en menos medida es cómo van a afrontar los otros tres amigos la pérdida tan prematura de su amigo.
Después de ver todos los temas tratados y las situaciones a desarrollar solo me queda decir que es una buena película, con buenos diálogos, situaciones divertidas y tristes también, lo mejor es que te pone a pensar en esto de la amistad y lo malo es que apenas roza la superficie, no se moja demasiado, y no sabemos en que punto del discurso está el director o lo que nos quiere enseñar, en este punto es algo confuso. Aunque la historia sea sincera.
Una buena banda sonora, unas localizaciones muy bien halladas, una historia veraz, buenas interpretaciones y el actor de moda hacen de esta una película perfecta para un buen día de asueto pero no deja demasiado poso en tu alma y menos en tu cerebro.
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